El secretario de Hacienda anunció este miércoles que propondrá al Presidente de la República un anteproyecto de ley que prohibiría, tajante y definitivamente, las máquinas tragamonedas en los colmados, billares, bingos y bancas de apuestas. El titular de la Secretaría de Hacienda hizo el anuncio en el marco de una rueda de prensa celebrada en el salón Aries del Hotel Lina, encuentro donde estaban presentes representantes de las iglesias Católica y del Concilio Evangélico, así como los presidentes del Comité Olímpico Dominicano (COD) y de la Federación Dominicana de Tenis (FEDOTENIS), licenciados Luisín Mejía y Persio Maldanado, respectivamente.

En la rueda de prensa también estaban presentes presidentes de clubes deportivos y de decenas de juntas de vecinos del Distrito Nacional, la provincia Santo Domingo y de otros pueblos del interior del país, así como el presidente de la Federación Dominicana de Ajedrez, señor Luis Belliard.

Bengoa significó que con esta iniciativa, asume el reto de buscar la prohibición de las máquinas tragamonedas de esos lugares públicos en aras de que prevalezcan las buenas costumbres y la salud mental en la sociedad.

Especificó que de esta manera, atiende recomendaciones que han formulado dirigentes de distintas entidades sociales, religiosas y comunitarias por la atracción a menores de edad que ejercen esas máquinas.

Explicó que anteproyecto de ley que presentará al presidente Fernández, para este someta a la consideración y aprobación del Congreso Nacional solo permitirá el funcionamiento de las máquinas tragamonedas en los casinos de juego.

Bengoa reveló que, actualmente, la Dirección de Casinos de la cartera tiene registradas 5 mil 269 máquinas de este tipo, pero ilegalmente se estima que están operando más de 15 mil en todo el país, según investigaciones realizadas por Hacienda, lo que significa que operan más de 20 mil máquinas en todo el país.

“Esto se ha convertido en un peligroso flagelo que afecta fundamentalmente a nuestros niños , adolescentes y jóvenes”, precisó Bengoa.

Manifestó que espera que las organizaciones barriales y los sectores preocupados por los problemas que causan esas máquinas en los barrios y sectores residenciales del país, cuando dicha pieza legislativa se enviada al Congreso, acudan para demandar su aprobación del proyecto en cuestión.

Indicó que no cree que un legislador que tenga aspiraciones de reelegirse para un nuevo período se oponga a la aprobación de dicha ley, ya que de hacerlo se estaría suicidando y no recibiría el voto de los ciudadanos de su demarcación política.