BONAO. Diferentes sectores de la provincia Monseñor Nouel solicitaron ayer una nueva repartición de las 100 viviendas del proyecto habitacional Simón Bolívar, construido por el gobierno de Venezuela, para los damnificados de las tormentas tropicales Olga y Nouel.

Los que favorecen el nuevo reparto de las casas alegan que la mayoría de esas viviendas fueron entregadas a funcionarios peledeístas y otras personas que no fueron afectadas por las tormentas.

El sacerdote Francisco Jiménez, de la parroquia Nuestra Señora de Fátima, dijo que más de 20 damnificados fueron excluidos de la lista original de los beneficiarios del proyecto habitacional para favorecer a personas vinculadas al gobierno.

El religioso de la iglesia Católica sostuvo que las autoridades gubernamentales de esta provincia realizaron una repartición injusta perjudicando a los sectores que verdaderamente sufrieron los efectos de las referidas tormentas.

De su lado, el ex senador del PLD, Oscar Santiago Batista, lamentó que una acción de solidaridad del gobierno de Venezuela, desencadene en un enfrentamiento diplomático, por el desconocimiento de una parte de las autoridades de Bonao.

"Las autoridades de Monseñor Nouel debieron limitarse a proteger esos bienes (casas) con la Policía Nacional y esperar que se cumpliera todo lo referente a la entrega formal de parte de los representantes del gobierno de Venezuela al Gobierno de la República Dominicana", expresó.

Las viviendas prefabricadas, valoradas en US$15 milo, fueron donadas dentro del proyecto "Petrocasas" y constan de dos habitaciones, un baño, comedor y cocina que abarca un espacio de 50 metros cuadrados sobre un solar de 100 metros cuadrados.

También dispone de una guardería, un casa club, un destacamento policial, un consultorio medico, áreas infantiles, canchas deportivas, un centro artesanal y otras áreas.