Agentes policiales contra motines disolvieron con bombas lacrimógenas una marcha de miembros del Colegio Médico Dominicano (CMD) en las inmediaciones del Congreso Nacional, a donde acudieron para denunciar alegados atropellos de que fueron víctimas al ser desalojados de la Secretaría de Salud Pública, donde el miércoles pasado iniciaron una huelga de hambre, en demanda de mejora salarial.

El grupo de médicos, encabezado por el doctor Waldo Ariel Suero, huyó despavorido para evadir los efectos de los gases lacrimógenos.

Posteriormente, la Cámara de Diputados decidió recibir una comisión del CMD que se reunió por espacio de diez minutos con legisladores de los principales partidos políticos.

El diputado del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Alejandro Montás, en representación del presidente de la Cámara Baja, Julio César Valentín, explicó que el hemiciclo estaba en disposición de escucharlos y servir de vehículo para que se produzca el diálogo demandado por el gremio médico, para que ese sector vuelva a la normalidad.

La visita de los médicos al Congreso fue sorpresiva, dado que no fue anunciada por ninguno de los miembros de la cúpula del CMD.

Sin embargo, la marcha comenzó en la Universidad Autónoma de Santo Domingo hasta la sede del Colegio Médico Dominicano, y de ahí al Congreso Nacional, donde los médicos exigieron respeto a su integridad y derecho de protesta.

Aunque la dirigencia del CMD suspendió la huelga de siete días que había convocado para la próxima semana, Suero anunció ayer una reactivación de las protestas en todos los hospitales y filiales del CMD. El gremio decidió también boicotear el cobro de la cuota de recuperación en todos los hospitales públicos del país.

Estudiantes de la UASD se adhirieron a la lucha de los médicos y protagonizaron enfrentamientos con agentes policiales en las inmediaciones de la academia.

Individuos encapuchados escenificaron escaramuzas con la Policía, tiraron basura y botellas en las inmediaciones de la calle Alma Mater, y lanzaron piedras a miembros de la Policía, que ripostaron con bombas lacrimógenas. La protesta provocó gran taponamiento de vehículos en las calles aledañas a la casa de estudio que, sin embargo, mantuvo la docencia abierta.

La dirigencia del CMD amenazó con llevar su denuncia de atropello a tribunales internacionales, según informó el doctor Jorge Chaín Herrera, quien dio a conocer la posición de la entidad gremial luego del desalojo de que fueron objeto los médicos de las instalaciones de la Secretaría de Salud Pública.