El presidente del Partido Revolucionario Dominicano, PRD, puntualizó hoy que la decisión adoptada por la alta dirección de esa organización de dejar fuera de la boleta congresual al diputado Julio Romero, es un reflejo de que en el PRD de los nuevos tiempos se escucha a la gente y se ponen en práctica los valores y principios que se predican. Cuestionado hoy en la mañana sobre la información que ofreciera ayer en relación con la exclusión de Romero, un diputado que cuenta con alta popularidad en su circunscripción y que buscaba la reelección, Vargas expuso que aunque la decisión no implica una condena al legislador, sí expresa la voluntad de la dirección del PRD de establecer una nueva sintonía con la sociedad.

El líder perredeísta resaltó como parte de esa decisión la inclusión de Milagros Ortiz Bosch, Ginette Bournigal, Orlando Jorge Mera, Milton Ray Guevara y otras figuras de ganado respeto en la sociedad civil, como candidatos a senadores por el Distrito Nacional, Puerto Plata, Santiago y Samaná, sin acudir a convenciones internas.

Varga expuso que su decisión de procurar la presidencia del PRD se basó en su convencimiento de que una serie de comportamientos de parte de su dirigencia, el partido se había distanciado de importantes sectores de la sociedad.

“Todos nuestros esfuerzos por imponer la disciplina, el orden, hacer respetar la voluntad democrática de las bases y el acatamiento a las decisiones institucionales de los organismos, se inscriben precisamente en esa dirección”, expuso.

Dijo entonces que parte de esos esfuerzos es la creación de la Unidad de Políticas Públicas, que servirá de soporte técnico a las propuestas de solución a los principales problemas nacionales y al discurso de las candidaturas y la dirección del partido.

Citó además las iniciativas para retomar las relaciones internacionales del partido, y la modernización de todo el trabajo partidario que van del establecimiento de un portal electrónico que ya está relacionando al PRD con la sociedad, especialmente a las jóvenes generaciones.

Rediseño institucional

Vargas citó también la conferencia que dio ayer en el Aula Magna de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, por invitación del Parlamento Juvenil, en la que expuso su visión sobre los cambios y reforma que deben seguir a la modificación de la nueva Carta Magna.

Puntualizó que para llevar el Estado a su propia legalidad es imprescindible que el ciudadano pueda acceder prontamente a los tribunales administrativos, para controlar así la arbitrariedad de un Estado que desaloja a los vendedores ambulantes en lugar de recolocarlos, en abierta violación a su libertad de empresa y al derecho a un mínimo vital.

Además de las correcciones para hacer más eficientes los poderes legislativo, judicial y ejecutivo, Vargas dijo que en el aspecto económico tenemos que corregir las actuaciones de un estado que exprime fiscalmente a los ciudadanos, expropia sin justa causa ni previa indemnización e interviene en nuestra vida o nuestros negocios, sin autorización legal para ello, sólo en base a una malquerencia, o un exabrupto, o un capricho de cualquier funcionario.

Agregó que los ciudadanos puedan realmente controlar la legalidad de la actuación de la Administración, se requiere de una Ley de la Jurisdicción Contencioso-Administrativa que cuando haya sido promulgada, la justicia administrativa no se limitará al Distrito Nacional y será plenamente accesible y oportuna para todo ciudadano, se encuentre en Jimaní o en Hato Mayor, viva éste en San Francisco o en Dajabón, en La Romana o en Montecristi, tanto en primera instancia como en apelación.

Puntualizó en su disertación que Hay que sin procedimiento administrativo adecuado, el ciudadano es un mero súbdito sujeto a los caprichos y veleidades del Estado y de los gobernantes; y sin justicia administrativa pronta, oportuna y accesible, no hay real control de la legalidad de la actuación de la Administración.