lunes, 31 de octubre de 2011

Policía dominicano tenía barberías como “fachadas” para traficar drogas


El escándalo que ha explotado dentro del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD), no sólo ha puesto al descubierto una banda de 17 oficiales que arreglaban multas de tránsito para privilegiar a funcionarios, narcos, amigos y relacionados a cambio de sobornos que incluían dinero en efectivo, caros regalos y otros “afectos”, sino que también reveló que el agente dominicano José Ramos, mantenía dos barberías como “tapes” (fachadas) para realizar operaciones de narcotráfico que le dejaron ganancias de netas de millares de dólares.
16 de los 17 oficiales implicados en el escándalo, considerado uno de los mayores de corrupción en las filas de la uniformada desde la década de los noventas, se declararon “no culpables” el viernes en la Corte  Suprema de El Bronx, luego que todos se entregaran a los fiscales a través de negociaciones con los fiscales.
La conducta de los policías, se incluye en delitos criminales graves de irrespeto a sus investiduras, violación a la ética y reglamentos del NYPD y sobre todo, la deshonra al uniforme y la placa que juraron llevar y representar con honestidad y ejemplo de la comunidad, dijeron los fiscales que encausan a los acusados.
Pero, la peor de todas es la acusación a Ramos, perteneciente al cuartel 40 en El Bronx y quien está imputado de haber mantenido dos barberías de su propiedad desde las que realizaba el tráfico de drogas y otras operaciones ilegales en sociedad con el narco de Guyana Lee King. El agente dominicano cayó también en las investigaciones del Departamento de Asuntos del NYPD, después que arreglara una multa a Lee y se le grabaran conversaciones hablando de frecuentes viajes a la República Dominicana y compra de lujosas propiedades en su país de origen.
Se le impuso una fianza de $500.000 dólares.
Según los documentos de la corte, también usaba su placa oficial para proteger a socios en negocio ilícito, además de estar implicado en varios robos. “Vivía como en un paraíso y era el rey”, dijeron fuentes de la investigación ayer domingo a un tabloide local. “Sus manos estaban metidas en todo”, añadieron las fuentes.
Las dos primeras barberías propiedad de Ramos se las regaló su padre, quien también era un policía, ahora retirado residiendo en Texas. Uno de los negocios está situado sólo a dos cuadras del cuartel donde trabajaba Ramos que tiene 17 años enrolado en la uniformada.
Los negocios ilegales de Ramos fueron descritos por los fiscales como “un imperio criminal” en los que además de drogas vendía CD de música y DVDs con películas pirateadas. El narcotraficante guyanés Lee King, socio del policía criollo, lo ayudó a convertir sus negocios en una sólida y lucrativa plataforma de hacer mucho dinero ilegal. King fue acusado junto al agente.
Las pesquisas para llegar hasta los 17 policías corruptos, comenzó precisamente por el seguimiento a Ramos, cuando Asuntos Internos montó un operativo que incluyó sofisticados mecanismos de vigilancia y el uso de soplones. “Durante años, Ramos se pudo salir con la suya, pero finalmente cayó”, dijeron los investigadores.
Para proteger a King, Ramos le alquiló un apartamento utilizando su nombre, le compró un carro y le dio un cartel de la policía para que no fuera multado cuando violaba reglas de tránsito en las calles de la ciudad.  Los fiscales dicen que King controlaba un amplio territorio para distribuir las drogas con la protección de Ramos al que le ofreció un montón de dinero.
Agregaron que con el correr de los años, la conducta delictiva de Ramos se hizo más frecuente y en ocasiones transportaba kilos de heroína y cocaína en el patrullero del NYPD que tenía asignado. La investigación sostiene que el agente dominicano se jactó con un encubierto que lo investigaba de que “yo, podría manejar desde El Bronx hasta Brooklyn con un cadáver en el maletero (baúl) y nadie me va a parar”, en referencia a que como conducía un coche de la policía, otros policías no iban a detenerlo en las calles y carreteras.
Los fiscales alegan que grabaron muchos videos a Ramos en momentos en que estafaba a narcotraficantes y extorsionaba a un propietario de una tienda de electrodomésticos. Muchas de las “víctimas” eran en realidad policías encubiertos.  Al policía dominicano corrupto, se le encontró entra otras, una cuenta con más de $54.000 dólares.
El abogado John Sandleitner, defensor de Ramos acusó a los fiscales de ensañarse y extralimitarse contra el dominicano que no tiene antecedentes penales. “La mayoría de las acusaciones son delitos menores”, añadió el jurista. “Hablar es muy fácil, pero se tendrá que demostrar que mi cliente es lo que la fiscalía dice que es”.
Ramos también exigía dinero a allegados para costearse viajes a la República Dominicana, los que calificaba de muy costosos.

0 comentarios:

Blog Archive

About Me

Lic. Frank Guerra
Ver todo mi perfil