El presidente de Hogar Crea Dominicano, Leopoldo Díaz, sostuvo que los menores de edad constituyen el 5 por ciento de todos los consumidores de drogas que están hoy acogidos a los programas de rehabilitación de esa entidad. Díaz informó que desde el año 2002 familias dominicanas comenzaron a pedirle a Hogar Crea que aceptara a menores adictos en sus instalaciones, por lo que desde hace un año fue abierto un centro especializado para adolescentes en Guazumal, Santiago. Agregó que en ese y en los 43 centros para adultos de que dispone Hogar Crea hay actualmente 1,300 personas en rehabilitación, de los que el 5% son menores.

 Entrevistado por Manuel Jiménez y Ángel Barriuso en el programa Propuesta Matinal, por el canal 45, Díaz atribuyó el auge en el consumo de drogas a que “solo se atacan los efectos y no las causas”.

 “El problema comienza en la familia”, manifestó el presidente de Hogar Crea, quien agregó que “entre el 50 y 60 por ciento de los jóvenes adictos proviene de hogares disfuncionales”.

Subrayó que a eso se añade las carencias de educación, el hecho de que el país es un puente para el narcotráfico y se incrementa el microtráfico, así como la “falta de oportunidad de los jóvenes para entrar al mercado laboral”.

Consideró que el problema se agrava cuando los jóvenes ven que los profesionales tienen que hacer huelga para que les aumenten los sueldos, lo que ellos traducen en que no vale la pena estudiar y se refugian en la droga y tras ella la criminalidad.

Advirtió que tratando de asustar no se va a lograr el éxito en las labores de prevención, pues a su juicio lo conveniente es inculcar valores éticos y morales para que la juventud encuentre sentido a la vida.

Díaz señaló que la adicción a las drogas no respeta clase social, ni raza, pero indicó que a Hogar Crea Dominicano llegan principalmente jóvenes de clase media hacia abajo, pero los de mejores condiciones económica van al sector privado y al extranjero.

Afirmó que actualmente el mayor consumo es de crack, le sigue la cocaína, mariguana y finalmente la heroína, de la que dijo “es muy adictiva, cara”, y puede estar incidiendo en la ola de violencia.

Cuando se le preguntó si favorece la modificación del Código Procesal Penal, Código Penal y el Código del Menor, Díaz consideró que el problema no es de falta de leyes, sino de aplicación de las leyes.

No obstante, Díaz apuntó que se deben endurecer las penas para los menores que cometen asesinatos porque con solo cinco años de prisión no es suficiente para rehabilitarlos.